miércoles, 30 de marzo de 2011

M-e-t-a

Saltaba a la soga, la cabeza alineada, la mirada en un punto fijo.

Las voces convertidas en ruidos.

Rotaba la cabeza sólo para ver el equilibro de esa balanza.

El todo o la nada.

Silencio producido por la espiración al no chocar con mis cuerdas vocales.

100 gramos focalización y otros 100 de intuición.

Mis manos toman las raíces de ese eucalipto,

eran marionetas de mi propio cuerpo.

100gramos de control y 100 de elección.

La cornisa era mi balcón mi terraza mi escalón,

100gramos de ambición, 100 gramos de pasión.

100gramos de los que están, 100gramos de los q alguna vez existieron.

Un total de 800gramos,

Tan sólo 200 más para llegar al kilogramo de ese Disco que el dia 23 se posaba sobre mi mano.

La soga se convirtió en raíz y la cabeza, mi cabeza apenas rotó hacia donde la balanza se inclinó...